Ayer vi un corto reportaje de rtve que me puso verdaderamente de mal humor. Trataba sobre los 250.000 embriones que, a día de hoy, permanecen congelados en los centros de reproducción asistida españoles, atrapados en lo que califican como un "limbo legislativo". Sus padres biológicos no saben qué hacer con ellos y al final se desentienden, dejando su destino en manos de las clínicas. Esto ya de por sí es para echarse a llorar, pero lo que más me soliviantó fue la actitud de los profesionales entrevistados hacia los embriones, a los que se refieren como si se tratase de meros tejidos, y no de seres humanos.
Ciberactivista Pro-Vida. Defendiendo los Derechos Humanos Pre-Natales y Post-Natales.